Cuando se emprende la búsqueda hacia el conocimiento y el desarrollo personal es como comprendemos que más allá de recibir enseñanzas de agentes externos somos nosotros los verdaderos maestros de nuestra vida, y que sólo los grandes maestros saben que el único lenguaje capaz de transformar positivamente nuestro entorno es la coherencia de nuestros actos.
Nuestra labor merece un espacio digno que trascienda las fronteras de nuestra comunidad y deposite, cálida y respetuosamente, el espíritu de nuestras instituciones en el pensamiento de la Sociedad. Un medio de expresión en movimiento capaz de transmitir y retroalimentarse de las emociones de aquéllos que también buscan una alternativa consciente para la Paz y el equilibrio Social.
